Hoy celebramos 10 años como iglesia, y el Espíritu Santo nos ha reunido no solo para mirar atrás, sino para recibir lo que viene. El Señor nos trae una palabra profética desde Isaías 44: “Mi bendición será sobre tus renuevos”.
Venimos de sequía, de luchas, de pérdida. Pero hoy, esta palabra es para los que están secos, para los que están a punto de rendirse, y para los que no tienen nada más… excepto fe.
Dios bendice lo nuevo. No se derrama vino nuevo en odres viejos. Por eso el Señor está secando todo lo que no debe permanecer: relaciones, estructuras, ideas y autosuficiencia.
La sequía es un anuncio profético: ¡vienen los renuevos!
Así como hace diez años no había nada y Dios lo transformó todo, hoy una nueva temporada se abre para nuestras vidas. Lo que Dios va a hacer en ti, no nacerá de lo que ya hiciste, sino de los tallos que están por brotar.
🌱 La sequía no es castigo, es preparación. Dios seca lo viejo para hacer espacio a lo nuevo.
💧 Viene lluvia sobre tu sequedad. Isaías 44:3 promete ríos sobre tierra árida. Lo seco va a florecer.
🔥 Dios bendice tus renuevos, no tus restos. No te apegues a lo muerto, suéltalo.
🌿 Un tallo puede transformarse en un gran cedro. No subestimes lo pequeño que está brotando.
🪔 Tu milagro será proporcional a la palabra que creas. Lo que crees, determina lo que recibes.
🧎♂️ Muere tú, para que viva Cristo en ti. No es tu fuerza, es Su poder.
🕊️ De tu sequía nacerá una nueva unción. Si no hay cruz, no hay resurrección.
🗣️ Anuncia lo venidero. No repitas desgracias. Profetiza lo que Dios te mostró.
💭 Sueña en grande. Si Dios te lo prometió, Él lo financiará.
🛤️ Enfócate en tu futuro. El pasado da nostalgia, el futuro da esperanza.
🔄 Adáptate en medio del desierto. Pablo dijo: “sé vivir en escasez y en abundancia”.
Dios dice: “Lo más glorioso no vendrá de tu esfuerzo, vendrá de tus renuevos”.
Hoy es el fin de una etapa y el comienzo de otra. Como Aarón, cuya vara reverdeció en una noche, Dios va a hacer florecer lo que parecía muerto.
Tú que pensaste que lo perdiste todo… vas a retoñar.
Viene algo nuevo: nueva unción, nuevas ideas, nuevos contactos, nuevos recursos, nueva gracia.
Hoy el Señor te dice:
“Yo, Jehová, he dicho… y lo haré” (Ezequiel 17:24).
Enfócate en tu futuro. Adáptate. Anuncia lo venidero. Porque lo mejor… está por venir.