Amada iglesia, hoy quiero llevarlos a una verdad profunda: todo lo que está escrito en la Palabra de Dios fue registrado para nuestra enseñanza, para darnos esperanza. Desde Génesis hasta Apocalipsis, cada relato, cada enseñanza, tiene un objetivo: formar nuestro carácter y fortalecer nuestra fe. Hoy, desde 2 Reyes 13:18-19, aprenderemos cómo Dios anhela darnos victorias continuas, y cómo nosotros muchas veces nos conformamos con lo poco cuando el cielo quiere entregarnos lo completo.
Lección 1: Acciona en lo natural para desatar lo sobrenatural
Dios honra la obediencia en lo pequeño. El profeta le ordenó al rey golpear el suelo. Parecía una acción sin sentido, pero había una conexión espiritual. Cada golpe en la tierra natural estaba abriendo cielos en lo sobrenatural. Así también nuestras canaletas, escombros y arreglos tienen valor espiritual cuando son hechos en obediencia.
Lección 2: Una acción presente provoca innumerables victorias futuras
Tus decisiones hoy afectan a tus hijos, nietos y generaciones futuras. Lo que haces ahora tiene eco en el tiempo. La obediencia del presente derrota enemigos que aún no se han levantado.
Lección 3: No es el método, es la obediencia
Dios no necesita que entiendas cómo sucederá el milagro. No fue el «grito técnico» lo que derribó Jericó, fue la obediencia. No es que el suelo tenga poder, es que obedecer tiene poder.
Lección 4: Dios te revela la acción, tú debes poner la perseverancia
No pares. Aunque llores, sigue golpeando. Aunque duela, sigue avanzando. La constancia y perseverancia son ingredientes esenciales del milagro.
Lección 5: Dios nunca te lo explicará todo
El profeta le dijo al rey: «golpea». No le explicó el por qué. La fe no necesita comprender, necesita confiar. Dios revela el «por qué» después de tu obediencia.
Lección 6: Existen hombres clave para tus victorias divinas
El Rey de Israel, con todo su poder, fue donde Eliseo, el hombre de Dios. Porque muchas de nuestras bendiciones están ligadas a la boca de un pastor. Hay promesas que se activan bajo cobertura y honra.
Lección 7: El plan de Dios es perfecto; los imperfectos somos nosotros
El plan original era que el Rey tuviera todas las victorias. Pero por detenerse, sólo obtuvo una parte. Dios quiere darte victorias completas, continuas, constantes. No te detengas.
Una gota de unción pesa más que toneladas de riqueza.
La obediencia en lo pequeño desata milagros en lo eterno.
La acción presente impacta el futuro de tu familia.
Dios honra la perseverancia constante.
No necesitas entender, necesitas obedecer.
Honra y cobertura pastoral son llaves de cumplimiento.
Aunque llores, sigue avanzando. No te detengas.
Hoy, el cielo te llama a vivir bajo una revelación: Dios quiere darte victorias continuas. Pero eso exige obediencia, acción en lo natural, perseverancia, honra y fe. El Rey golpeó solo tres veces y se perdió la victoria completa. No seas como él. Golpea hasta que el cielo diga «basta». Sirve, da, camina, aunque sea llorando, pero no te detengas. Dios hará lo sobrenatural, si tú haces lo natural. Hoy es el día para comenzar a vivir de gloria en gloria y de victoria en victoria.